Direcciona cualquier nombre de dominio del que seas propietario a tu propio sitio web: cualquier persona que escriba ese nombre de dominio en el navegador será dirigida directamente a tu sitio web.
Previene las transferencias accidentales —o intencionales— de propiedad de dominio y evita que cualquier pueda redireccionar tus servidores de nombres.
Administra los registros de tu servidor de nombres de dominios (DNS) y configura tu correo electrónico, protocolo de transferencia de archivos (FTP), subdominios y ubicación de sitio web: todo desde el mismo panel de control.
Reasigna tu nombre de dominio (es necesario pagar una cuota) o cambia los contactos para tu dominio.
Supervisa el estado de tu dominio. Te advertiremos al instante si ha habido algún cambio o si detectamos actividades sospechosas.
El precio no incluye los impuestos aplicables y las tarifas ICANN.